La idea de preparar tus maletas para ir a la casa de campo, dejar atrás la vida cotidiana y la ciudad donde vives en búsqueda de una vida más tranquila es una propuesta tan tentadora cada fin de semana. El poder disfrutar de un ambiente acogedor y de un paisaje con gran cantidad de árboles, bellas flores o despertar con el canto de las aves, es realmente un regalo que nos merecemos día a día.
A lo largo de los años, hemos cambiado nuestro estilo y ritmo de vida para adaptarnos al entorno y horario que nos rodea. Hoy en día el ritmo de vida de las personas se ha vuelto un poco loco. La llegada de la pandemia nos obligó a reinventarnos. Desde que nos despertamos vivimos bajo una presión constante y permanente. Por eso, no es de extrañar escuchar frases como "Como en el campo, no vives en ningún lado". Lo cierto es que no faltan las razones, pues tener una casa de campo tiene muchas ventajas.
Vivir en una casa de campo reduce el estrés y mejora tu calidad de vida
1. Respiras aire más limpio
Las grandes ciudades están desbordadas de contaminación debido a la concetración de gases de efecto invernadero. El uso de vehículos para el transporte, los gases que expulsan las industrias, entre otros contaminantes perjudican la salud de los pulones.
Obviamente al vivir en una casa de campo estas cosas no ocurren. Tanto por la calidad de un aire mucho más puro. En consecuencia, los pulmones que respiren un aire limpio gozan de una mejor salud. Lo mismo sucede al ejercitarte, el aire del entorno favorece más la oxigenación de tu cuerpo.
2. Descansar sin ruidos
Estar rodeados de avenidas o calles muy concurridas generan contaminación auditiva. Esto, por las noches llegan a impedir que tengas un sueño profundo. Mientras tanto, en el campo los ruidos - más aún por las noches - son muy ocasionales.
Por lo mucho, se pueden escuchar el sonido de los grillos o los cantos de las aves, pero muchas veces estos mismos sonidos te conectan con la naturaleza y terminan siendo relajantes.
3. Estrés visual
La jungla de cemento genera estrés visual y monotonía. Por contraparte, la naturaleza es viva, por tanto va cambiando conforme cambian los climas y te hacen consciente del paso del tiempo y de la vida. Puedes experimentar cosas como ver plantas crecer, árboles o arbustos de tu alrededor.
Poder salir de tu casa y ver un amanecer o atardecer desde el campo es un relajante natural que te permitirá gozar de una mejor salud y calidad de vida.
4. Vida sin apuros
Vivir en la ciudad es homólogo a vivir con los contratiempos y el estrés del tráfico. Tienes prisa por llegar a cualquier lugar y te estresas porque si no logras tomar el tiempo de anticipación suficiente, no llegas a tiempo a tu destino.
Además, la ciudad concentra a mucha gente, lo que genera aglomeración y si no enfrentas una gran cola vehicular, enfrentas grandes colas en las cajas de los centros comerciales.
5. Trabajar desde el campo
El Covid-19 nos planteó la posibilidad de trabajar desde casa, y al trabajar desde casa muchos obtaron por mudarse a una casa de campo. Además de que estás menos expuesto a un posible contagio, puedes realizar actividades al aire libre sin poner en riesgo tu salud ni la de tu familia.
Con esto tienes muchas razones para considerar mudarte y vivir en el campo. Conoce más sobre arquitectura y construcción sustentable junto a nosotros. Encuéntranos en Facebook e Instagram.